viernes, 12 de octubre de 2007

Lesión del ligamento cruzado anterior (LCA)





Causas

Las rupturas del LCA pueden deberse a lesiones por algún contacto o sin contacto. Un golpe en un lado de la rodilla, como puede ocurrir en una atajada en el fútbol, puede ocasionar una ruptura del LCA.
Por otra parte, una parada rápida, combinada con un cambio de dirección mientras se está corriendo, girando, aterrizando de un salto o extendiendo demasiado la articulación de la rodilla (llamada rodilla hiperextendida) puede causar una lesión al LCA.


Síntomas



Síntomas tempranos:
Un sonido "crujiente" al momento de la lesión
Dolor severo
Inflamación de la rodilla dentro de las 6 horas posteriores a la lesión

Síntomas tardíos:
Inestabilidad de la articulación de la rodilla
Artritis.



Primeros auxilios

Una lesión de LCA se debe tratar con la colocación de una férula, aplicación de hielo, elevación de la articulación por encima del nivel del corazón y analgésicos tales como los antinflamatorios no esteroides (como el ibuprofeno). El paciente no debe continuar jugando hasta que se lleve a cabo la evaluación y el tratamiento.
Algunas personas pueden necesitar muletas para caminar hasta que la inflamación y el dolor hayan mejorado. Asimismo, la fisioterapia puede ayudar a recuperar la movilidad de las articulaciones y la fortaleza de las piernas.
Si la inestabilidad continúa aún después de que se ha recuperado la movilidad de la rodilla y la fortaleza de las piernas, la mayoría de los ortopedistas recomiendan una reconstrucción del LCA. El ligamento viejo no se puede reparar, entonces es necesario construir uno nuevo. Para llevar a cabo este procedimiento, usualmente se utiliza un pedazo de tendón rotuliano (el tendón que conecta la rótula con la tibia), aunque los tendones de la corva también pueden ser efectivos. Igualmente, se pueden utilizar injertos de cadáveres para reconstruir este ligamento.


Tratamiento kinésico

PRIMERA SEMANA
Reposo absoluto
Frío local durante 15 min cada hora
Electroestimulación muscular del cuadriceps
Elevación de la pierna con extensión de la rodilla
Ejercicios activos de extensión de la rodilla (contracción del cuadríceps isometría)
Movimientos pasivos de la rodilla (0-90º)
Desplazamiento mínimo (siempre con muletas)

ENTRE 1-2 SEMANAS (añadir a lo anterior)
Desplazamiento con muletas (carga parcial)
Estimular el soporte del peso corporal si se tolera
Ejercicios activos de flexión de la rodilla (hasta 90º)
Retirada de los puntos

ENTRE 2-3 SEMANAS (añadir a lo anterior)
Movilización de la rótula
Reeducación de la marcha
Marcha sin muletas
Ejercicios activos de flexión de la rodilla hasta limitación por dolor
Bicicleta estática (cuando la flexión de rodilla sea de 100º)
Ejercicios en piscina
Estimulacón eléctrica muscular

ENTRE 3-5 SEMANAS (añadir a lo anterior)
Flexión pasiva de la rodilla
Entrenamiento propioceptivo y de equilibrio
Ejercicios en cadena cinética cerrada para cuadríceps e isquiotibiales (p.ej. sentadilla, prensa de piernas.)
Entrenamiento isocinético
Estimulacón eléctrica muscular

ENTRE 5-6 SEMANAS (añadir a lo anterior)
Trotar, carrera muy suave
Inicio de ejercicios de agilidad

ENTRE 7-10 SEMANAS (añadir a lo anterior)
Intensificar todo lo anterior
Correr recto sobre superficie uniforme

A PARTIR DE 10 SEMANAS (añadir a lo anterior)
Aumento de la agilidad
Ejercicios específicos de la actividad deportiva (muy baja intensidad)

A PARTIR DE 3 MESES (añadir a lo anterior)
Intensificar todo lo anterior
Trotar y correr sobre cualquier superficie
Correr con giros de 90º, 180º y 360º
Quiebros con cambios de dirección de 45º
Carrera con aceleraciones y deceleraciones

ENTRE 4-6 MESES (añadir a lo anterior)
Vuelta a la práctica deportiva habitual

jueves, 6 de septiembre de 2007


Las lesiones deportivas ocurren con ocasión de la actividad física tanto recreativa como de competición.Pueden aparecer por accidentes o por sobrecarga (presión excesiva sobre un hueso o articulación, etc.), y no difieren de las lesiones que se producen por causas ajenas al ejercicio físico.Las lesiones necesitan no sólo un correcto diagnóstico y un tratamiento adecuado, sino también una prevención que contribuya a una sensación de bienestar y a una mejor calidad de vida derivados de la práctica deportiva
La prevención de lesiones en el deporte depende de una serie de factores, como son:
Una adecuada preparación física.
Utilización del equipo apropiado.
Cumplimiento de las reglas o normas del deporte que se practique.
Pasar controles de salud.
Llevar una correcta alimentación e hidratación.
También es muy importante dar el reposo necesario a aquellas partes del cuerpo que se sobrecargan con el esfuerzo físico.